OPERA PRIMA
A mi Lolita particular
Te bates en un
sueño infinito
sobre las
brasileñas sábanas de un chino indigesto.
Los acordes
pueblan de humo el comedor, sin tabaco,
con una bossa-jazz sugerente y
atractiva .
Te pierdes,
entre lo onírico y lo real
de una tarde de
sábado mal aprovechada.
No logras ver
la musa del Invierno que nos aletarga
encarcelados entre estas cuatro
paredes.
La bossa sigue,
poco a poco consigues levantarte
y te acercas
hasta el lavabo,
pero ya la
rueda vuelve a girar y nos empuja
hacia la
incertidumbre de una noche sin planes ,
hacia el sopor
de crear una vía de escape con poca inspiración,
postergando,
eternamente, los deberes para mañana.
Xaplin de l'Esguard
foto de Ruth Morán